Dicen que la primera impresión es la que cuenta, por eso no puede faltar un plan de incorporación para el nuevo personal en tu empresa. ¡Retén el talento, evita al máximo la rotación de personal y deja huella! Un buen plan de acogida puede aumentar la productividad del empleado en más de un 70%. Te explicamos todo lo que debes saber para fidelizar a tus trabajadores desde el primer día.
Qué hacer antes de la incorporación
Después de la entrevista viene el momento de los preparativos para la nueva incorporación. Entre los más importantes podemos destacar:
a) Preparar el espacio de trabajo, configurar su teléfono y cuenta de correo al directorio de empleados.
b) Preparar documentación para los trámites necesarios con el departamento de recursos humanos, administración y prevención de riesgos laborales.
c) Se informa al nuevo empleado de cómo va a ser su jornada laboral, las normas y valores de la empresa, horarios, organigrama y los procedimientos formativos, si son necesarios.
¡Primer día de acogida!
a) Entregar el kit de bienvenida. Debe incluir información de la empresa y su plan de adaptación, además de algún producto de merchandising. Los regalos de bienvenida siempre motivan al personal y fomentan una actitud positiva.
b) Haz un tour por tu empresa y presenta tu nueva incorporación al resto de la plantilla. Conocer los diferentes departamentos es importante para que comprenda cómo funciona la empresa.
c) Reserva un rato para empezar la formación y para responder las preguntas que pueda tener el nuevo trabajador en su primer día de trabajo.
La primera semana: decisiva en la acogida
La primera semana es decisiva para el trabajador. Es importante que se sienta bien acogido, que respondamos sus preguntas y que sigamos formándole en su puesto. Nuestras acciones deben hablar por si solas para que se sienta parte del equipo, como cualquier otra persona.
a) En todo trabajo es importante seleccionar a una persona para que sea el mentor/a o guía de la nueva incorporación. De esta manera, puede facilitar la adaptación e incluso agilizarla.
b) Periódicamente debemos reunirnos con el recién llegado para disipar las dudas o preguntas que vaya teniendo. Es cuestión de monitorizar los planes de acogida para evitar una mala adaptación.
c) La formación debe continuar, pero de manera dosificada. La adaptación en cuanto a la formación puede ser abrumadora, así que no olvides distribuir el aprendizaje para evitar una carga demasiado intensa.
Nunca dejamos de fidelizar al empleado
Y es que, la adaptación a una empresa es un proceso continuo. Para crecer hay que innovar, y todas las empresas pasan por procesos de transformación. Los trabajadores deben ir aprendiendo nuevas metodologías y adaptándose constantemente a nuevas tecnologías. Por eso decimos que nunca dejamos de fidelizar al empleado.
a) No olvides el feedback. Para que el nuevo empleado se sienta valorado, es imprescindible hacerle participar en reuniones y mantener un contacto constante y fluido. De esta manera se comunica positivamente y fortalece la motivación, pero también se resuelven posibles inconformidades en el trabajo.
b) ¿Qué mejor que fomentar el trabajo en equipo? Si no has organizado nunca actividades de team building ahora es el momento. Son ideales para unir a las personas y mirar hacia una misma dirección. Si quieres saber más puedes consultar este artículo que escribimos.
c) Además de trabajar en el plan de acogida, es interesante desarrollar también un plan de fidelización. Una de las principales herramientas para retener el talento son las estrategias de employer branding. Recordad que para retener el talento no solo basta una subida de salario. Aspectos como la motivación, buen ambiente laboral y la conciliación juegan su parte en el juego.
